viernes, 21 de enero de 2011

EL DISCO DE LA SEMANA

EDWARDS HAND: Edwards Hand (GRT Records, 1969; reedición en CD con bonus por Lightning Tree, 2007)
El dúo formado por Rod Edwards y Roger Hand facturaron en 1969 una de las joyas oscuras y casi perdidas de los 60, un disco grabado en Inglaterra pero sólo publicado en Estados Unidos y en el que se cumple la recurrente historia de disco de enorme calidad hecho por prometedores músicos que se pierde sin dejar rastro y sin impacto entre el público por falta de interés y promoción de la discográfica.
Edwards y Hand no eran nuevos en el negocio de la música cuando grabaron este disco, ya que en 1968 habían editado el LP
THE HUGE WORLD OF EMILY SMALL bajo el nombre de Picadilly Line, una colección de canciones de soft pop envueltas en una portada psicodélica.
Tras la escasa acogida de ese disco el dúo se separó para volver a juntarse tras el interés que su música despertó en George Martin, el productor de los Beatles, el cuál aceptó el trabajo de producir las canciones de Edwards y Hand (su primer trabajo tras el WHITE ALBUM de los Beatles) ayudado por el ingeniero Geoff Emerick y auspiciados por el contrato de publicación que consiguieron con GRT Records para Estados Unidos.
Once canciones son las que contiene tan preciado artefacto producido con todo el lujo que permitía un estudio de grabación como Abbey Road y las cuatro pistas que la técnica permitía, multitud de capas de sonido a base de orquestaciones, secciones de vientos, teclados, bases rítmicas en ocasiones realmente poderosas... Todo para conjugar letras optimistas y luminosas con el pop barroco, el soft pop (que enlaza con el sunshine pop norteamericano), a los Kinks de la etapa del VILLAGE GREEN, el Swinging London, a las producciones de Curt Boettcher y a los Kaleidoscope ingleses.
Banjo Pier toma su inspiración de los Everly Brothers, Simon & Garfunkel y los Beatles con una intensa orquestación y toques de Hammond y piano que hacen avanzar la composición. Le sigue Friday Hill, llena de guitarras acústicas, flauta y cellos en un tema muy cercano a los de Donovan, mientras que el comienzo tranquilo de Episodes, Being The First Part contrasta con el ritmo más uptempo que adquiere para convertirse en el tema más pegadizo del disco (si conoceis a los Free Design os podeis hacer a la idea).
Close My Eyes tiene un feel muy de la Costa Oeste americana (pienso en los Association) mientras que House Of Cards es un tema de pop psicodélico con flautas cimbreantes que impulsan el tema. Cualquier canción cuya letra diga I look into my picture book and everything is there es buena, podeis creerme.
La poética If I Thought You'd Ever Change Your Mind (única composición ajena del disco) posee un bajo y batería totalmente pertenecientes al pop facturado en Londres en el período pero al mismo tiempo percibo semejanzas con producciones norteamericanas, como las de los
Brooklyn Bridge. Characters No.1 tiene cierto toque de costumbrismo británico al modo de los Kinks pero más optimista, un experimento en el que se incluyen partes coreadas por una muchedumbre, y le sigue una canción totalmente acústica, Orange Peel, cuyos primeros segundos, algunas de las estrofas y su final sorprendentemente me recuerdan mucho a Going To California, de Led Zeppelin.
Ese sonido acústico contrasta con el de la siguiente canción donde de nuevo tenemos esa poderosa y groovy base rítmica, más una orquestación y un pegadizo estribillo que me hace preguntarme por qué demonios Sing Along With The Singer no fue un hit! Magic Car es un ejemplo de Toytown Pop y en ella se nos habla de viajes en coches mágicos y voladores con los que nada está muy lejos, y de esta forma amable llegamos al final del disco con Days Of Our Life, una oda a la infancia (tema recurrente en la psicodelia británica) que es el particular
A Day In The Life de los Edwards Hand, una pequeña suite con multitud de secciones y cambios rítmicos al modo del tema de los Beatles.

Tras el disco el teclista y cantante Rod Edwards colaboró con Marianne Segal (ambos en la foto) en la grabación del sensacional disco de folk psicodélico de los Jade, y un nuevo LP de los Edwards Hand vio la luz bajo el título de STRANDED en 1970.
Esta joya que no debería ser olvidada de nuevo se completa con cuatro bonus tracks, cuatro demos acústicas de canciones anteriores a la etapa del dúo como Picadilly Line.
Totalmente recomendado.
by David

3 comentarios:

Magic Pop dijo...

Genial reseña para uno de mis discos favoritos. Sin duda, sería digna de figurar en una cada vez más necesaria enciclopedia en castellano al modo de esos geniales Acid Archives o el Galactic Ramble. Cada día me resulta más emocionante recordar esa época a medio camino entre la psicodelia y el pop, a punto de volverse en algunas manos un tanto pretenciosa con el progresivo y un poco antes de endurecerse con ese hard rock consecuente con los recién estrenados setenta. Gracias amigo por tan instructivo y ameno artículo sobre este maravilloso dúo melódico.

Un abrazo
Àlex

Anónimo dijo...

Exquisito artículo, en serio.

Saludos

Liou Duvinini dijo...

interesante...