
No soy ningún experto en técnicas guitarrísticas, ni suelo distinguir los pequeños matices que los avezados eruditos encuentran en tal o cual guitarrista, pero no puedo sino sumarme al tópico generalizado de que Thompson era y es un guitarrista genial e innovador. Tampoco estoy familiarizado con su discografía en solitario, pero sí se de sus andanzas y relación con los Mighty Baby, ex-miembros de los Action en su paso al progresivismo con los que compartía Thompson su inmersión en el culto sufí. Pero es que sólo con ese legado de cinco discos de Fairport Convention, los esenciales dentro de la discografía del grupo, Richard Thompson se ganó su inclusión en el Olimpo de la Gran Música.
David