viernes, 28 de enero de 2011

EL DISCO DE LA SEMANA

THE FOUNDATIONS: From The Foundations (PYE, 1967; reedición en cd por Sequel Records, 1998)
Fascinante el mundillo musical inglés de los últimos años 60, en el que convivían las propuestas más underground y vanguardistas con aquellas destinadas a luchar por entrar en las listas de éxitos y aparecer en Top of the Pops, una comercialidad en la que en muchas ocasiones, y a diferencia de lo que ha sucedido en posteriores décadas, habían muchos ejemplos de gran calidad, fijándose en sonidos y géneros musicales de enjundia como en el caso que nos ocupa, el soul de los Foundations.
Inicialmente una agrupación multirracial soulera con poco recorrido en el circuito de clubs, los Foundations llamaron la atención del compositor y productor Tony Macaulay, que les consiguió un contrato con el sello PYE y les nutrió de canciones compuestas por él y por su colaborador John Macleod. Su primer single, Baby, Now That I've Found You, fue un inesperado número 1 en noviembre de 1967 impulsado por el apoyo de la recientemente inaugurada Radio 1, y reflejaba que los gustos de la mayoría estaban dispuestos a recibir canciones fáciles y de consumo rápido, que la nube psicodélica se estaba disipando fuera del entorno underground, que el soul volvía con fuerza tras el verano del amor y que estilos musicales como ese eran todavía (y lo seguirían siendo en la década de 1970) una fuerza poderosa en sitios como el norte de Inglaterra.
Tanto ese single como el disco de debut del grupo, FROM THE FOUNDATIONS, son claros ejemplos de la habilidad de Macaulay y Macleod para escribir piezas de pop perfecto y dirigidos como flechas a la diana del éxito comercial, conjugando estilos fácilmente asimilables y convirtiendo a los Foundations en el perfecto amalgama de pop, soul y mensajes nada amenazadores. Algo así como la respuesta inglesa al bubblegum estadounidense, una respuesta fuertemente liderada por Macaulay y Macleod durante los siguientes años con éxitos de Long John Baldry, Pickettywitch, Marmalade, Edison Lighthouse, etc. La primera impresión de Macaulay del grupo fue su poca destreza, por no llamarlos malos directamente, pero le atrajo su sonido americano y su fijación con la Motown. La grabación de ese primer single requirió de la ayuda de músicos de estudio y fue cuando se añadieron los coros que todos comprendieron que la cosa iba a funcionar. Precisamente, esos coros se convirtieron en la marca de fábrica del grupo en su primeras grabaciones, unos coros normalmente no muy entonados ni afinados, casi como los de unos parroquianos de un bar que entonan su canción favorita, pero igualmente infecciosos y simpáticos. A esa característica se le añade la pobre producción del disco, a cargo de Tony Macaulay, dando la impresión de que las canciones se registraron casi a la primera, en vivo en el estudio, sin pulirlas en exceso. Y, como colofón, la voz del cantante de Trinidad Clem Curtis, que siempre me ha parecido algo constreñida, limitada, incapaz de llegar a altos registros, creando algo de confusión en determinados momentos de las canciones en que éstos eran requeridos.
A Baby, Now That I've Found You hay que añadirles como composiciones de Macaulay y Macleod que acabaron formando parte de ese primer álbum la bonita Come Back to Me, I Can Take or Leave Your Loving, The Writing's on the Wall y la más upbeat y funky Mr. Personality Man. Por su parte Hold Me Just a Little While Longer no estaba compuesta por ellos, pero encaja a la perfección con el canon.
El resto son versiones y son en las que más se nota el escaso empeño en la producción, pudiendo llegar a adivinarse en el sonido el pedal del bombo o los de los teclados, tal es el caso de Love Is a Five Letter Word, una infecciosa lectura instrumental de Call Me de Tony Hatch, una de las más frenéticas versiones que he oido de Show Me en la que por fin Clem Curtis se libera en parte y se desgañita como buen soul man y que enlaza muy bien con Jerkin' the Dog, a la que sigue una, en parte deslabazada, A Whole New Thing.
En 1968 se publicó su siguiente single, Back on My Feet Again, de nuevo de Macaulay y Macleod y una de mis favoritas del grupo, con un potente sonido Motown, para a continuación abandonar la formación Clem Curtis y encontrar un nuevo cantante, gesticulante, joven y airado, con registros más altos y más presencia escénica, Colin Young, con el que siguieron teniendo éxitos un par de años hasta su disolución, una carrera endeble tras el abandono de Tony Macaulay como su mentor. Ambos -grupos y productor- apenas se soportaban.
Un disco divertido, de fácil escucha y esencial para entender el resurgir del soul en Inglaterra y el nacimiento de una nueva generación de grupos de pop facilón y comercial con un amplio poso soul. Un artefacto algo difícil de conseguir, pero integrado en un estupendo cd doble que incluye toda la discografía del grupo.
by David

viernes, 21 de enero de 2011

EL DISCO DE LA SEMANA

EDWARDS HAND: Edwards Hand (GRT Records, 1969; reedición en CD con bonus por Lightning Tree, 2007)
El dúo formado por Rod Edwards y Roger Hand facturaron en 1969 una de las joyas oscuras y casi perdidas de los 60, un disco grabado en Inglaterra pero sólo publicado en Estados Unidos y en el que se cumple la recurrente historia de disco de enorme calidad hecho por prometedores músicos que se pierde sin dejar rastro y sin impacto entre el público por falta de interés y promoción de la discográfica.
Edwards y Hand no eran nuevos en el negocio de la música cuando grabaron este disco, ya que en 1968 habían editado el LP
THE HUGE WORLD OF EMILY SMALL bajo el nombre de Picadilly Line, una colección de canciones de soft pop envueltas en una portada psicodélica.
Tras la escasa acogida de ese disco el dúo se separó para volver a juntarse tras el interés que su música despertó en George Martin, el productor de los Beatles, el cuál aceptó el trabajo de producir las canciones de Edwards y Hand (su primer trabajo tras el WHITE ALBUM de los Beatles) ayudado por el ingeniero Geoff Emerick y auspiciados por el contrato de publicación que consiguieron con GRT Records para Estados Unidos.
Once canciones son las que contiene tan preciado artefacto producido con todo el lujo que permitía un estudio de grabación como Abbey Road y las cuatro pistas que la técnica permitía, multitud de capas de sonido a base de orquestaciones, secciones de vientos, teclados, bases rítmicas en ocasiones realmente poderosas... Todo para conjugar letras optimistas y luminosas con el pop barroco, el soft pop (que enlaza con el sunshine pop norteamericano), a los Kinks de la etapa del VILLAGE GREEN, el Swinging London, a las producciones de Curt Boettcher y a los Kaleidoscope ingleses.
Banjo Pier toma su inspiración de los Everly Brothers, Simon & Garfunkel y los Beatles con una intensa orquestación y toques de Hammond y piano que hacen avanzar la composición. Le sigue Friday Hill, llena de guitarras acústicas, flauta y cellos en un tema muy cercano a los de Donovan, mientras que el comienzo tranquilo de Episodes, Being The First Part contrasta con el ritmo más uptempo que adquiere para convertirse en el tema más pegadizo del disco (si conoceis a los Free Design os podeis hacer a la idea).
Close My Eyes tiene un feel muy de la Costa Oeste americana (pienso en los Association) mientras que House Of Cards es un tema de pop psicodélico con flautas cimbreantes que impulsan el tema. Cualquier canción cuya letra diga I look into my picture book and everything is there es buena, podeis creerme.
La poética If I Thought You'd Ever Change Your Mind (única composición ajena del disco) posee un bajo y batería totalmente pertenecientes al pop facturado en Londres en el período pero al mismo tiempo percibo semejanzas con producciones norteamericanas, como las de los
Brooklyn Bridge. Characters No.1 tiene cierto toque de costumbrismo británico al modo de los Kinks pero más optimista, un experimento en el que se incluyen partes coreadas por una muchedumbre, y le sigue una canción totalmente acústica, Orange Peel, cuyos primeros segundos, algunas de las estrofas y su final sorprendentemente me recuerdan mucho a Going To California, de Led Zeppelin.
Ese sonido acústico contrasta con el de la siguiente canción donde de nuevo tenemos esa poderosa y groovy base rítmica, más una orquestación y un pegadizo estribillo que me hace preguntarme por qué demonios Sing Along With The Singer no fue un hit! Magic Car es un ejemplo de Toytown Pop y en ella se nos habla de viajes en coches mágicos y voladores con los que nada está muy lejos, y de esta forma amable llegamos al final del disco con Days Of Our Life, una oda a la infancia (tema recurrente en la psicodelia británica) que es el particular
A Day In The Life de los Edwards Hand, una pequeña suite con multitud de secciones y cambios rítmicos al modo del tema de los Beatles.

Tras el disco el teclista y cantante Rod Edwards colaboró con Marianne Segal (ambos en la foto) en la grabación del sensacional disco de folk psicodélico de los Jade, y un nuevo LP de los Edwards Hand vio la luz bajo el título de STRANDED en 1970.
Esta joya que no debería ser olvidada de nuevo se completa con cuatro bonus tracks, cuatro demos acústicas de canciones anteriores a la etapa del dúo como Picadilly Line.
Totalmente recomendado.
by David

jueves, 20 de enero de 2011

¡VUELVE MAGIC POP!

Con un retraso imperdonable por mi parte comparto con todos los amigos de Making Time, con gran gozo y alegría, la vuelta de un referente informativo dentro de la escena mod (y del pop en general) nacional, la vuelta de Àlex Magic Pop, esta vez con un nuevo proyecto en forma de blog dispuesto a no parar de generar información sobre la música que nos gusta, sus creadores, eventos a los que hay que acudir, etc. siempre con la mentalidad abierta y la devoción que vuelca en sus proyectos Àlex.
Como un magnífico regalo de Reyes, comenzó su andadura el 5 de enero, y ya lleva una increible cantidad de entradas, una desbordante fuente de información: entrevistas, reseñas, anuncio de eventos, etc.
En definitiva, una estupenda noticia y una cita ineludible para todos aquellos interesados en la escena mod.
by David

viernes, 14 de enero de 2011

EL DISCO DE LA SEMANA

VARIOS: Shapes & Sounds Volume 2. Shades of deepest purple from the BBC archives 1967 - 1971 (Top Sounds Records, 2008)
El segundo de esta, hasta ahora, serie de tres estupendos recopilatorios dedicados a las grabaciones para la BBC (tanto para programas de radio como de televisión) de bandas del momento de mayor esplendor del pop británico, normalmente grupos no de primera fila sino de esa enorme y de grandísima calidad "segunda división", grupos underground que luchaban por asomarse a los puestos más altos de la lista de éxito pero que no forman parte de la asumida mayoritariamente realeza del pop sixties, y que se acercaban a grabar estas sesiones para la BBC para cumplimentar las horas de música en directo exigidas por el sindicato de músicos británicos y, como no, para buscar su porción de éxito.
¿Pero qué habría sido del Swinging London sin bandas como las que aquí aparecen? Seguramente algo muy distinto de lo que hemos conocido -y amado- durante tanto tiempo. Y, ¿qué sería de la escena mod actual -la vertiente "blanca", claro- sin tantos y tantos discos recuperados de este tipo de bandas y sonidos? También algo muy diferente.
Nigel Lees, experto en este tipo de cosas ha lanzado estos recopilatorios a través de su sello Top Sounds, y vaya labor de arqueología y recuperación ha realizado. Ocho son las bandas presentes en este volumen representadas en grabaciones para la BBC que demuestran la enorme calidad e intensidad de estos grupos en directo, seguramente adquirida gracias a esas residencias en clubs y giras que les obligaban a realizar pases durante todos los días de la semana e incluso más de uno el mismo día. Cualquier banda menor de este período seguramente barrería del escenario a muchas bandas actuales de gran prestigio... ¡seguro!
El sonido de las grabaciones es soberbio (salvo dos de las mismas, debido a que eran las únicas copias existentes, y han de estar aquí por su valor testimonial), muestra del trabajo de los técnicos de la BBC, fresco e inmediato, y rivaliza con los propios discos publicados por estos grupos y en algún caso, incluso, los supera.
The Casuals están aquí presentes con tres canciones, entre ellas Jesamine (en el vídeo), su gran éxito y, sobre todo, su versión de Take Me For A Little While, una de mis canciones favoritas de siempre y la defienden a un gran nivel rivalizando en feel, dramatismo e intensidad con la de Vanilla Fudge. Toda una sorpresa la de este grupo, considerado habitualmente como de pop "comercial". Ejemplo de que aquí el más tonto hacía relojes. Al igual que Katch 22, banda usualmente considerada de soft pop con una gran influencia del pop norteamericano, que aquí atacan una endurecida The Price Of Love de los Everly Brothers (también la hacían por la época los Status Quo). Esta grabación es una de las dos de peor calidad del disco, recuperada de una vieja cinta casera y único ejemplo superviviente de las sesiones del grupo para la BBC (su LP ha sido reeditado por Wah Wah Records).
The Mirage, banda de culto del pop psicodélico inglés, interpreta uno de sus clásicos, The Wedding of Ramona Blair con glorioso Mellotron incluido mientras que los desconocidos Portrait llevan a cabo el clásico Born To Be Wild y Killing Floor su Milkman, pieza de blues hardroquero que muestra que hay que hacerse con los discos (dos, de 1969 y 1970) de esta banda ya!
Una de las grandes bandas británicas de la época fueron The Alan Bown Set, el combo de soul que hacia 1967 había comenzado su transformación en una potente agrupación de rock con influencia psicodélica y sección de vientos. ¡Maravillosa combinación que debería darse mucho más! Llamados en esos momentos The Alan Bown! (en la foto de arriba) y con la sensacional voz de Jess Roden podemos disfrutar de los temas Pandora's Golden Heebie Jeebies, Magic Handkerchief (magnífica canción de su LP de 1968 OUTWARD BOWN) y Movie Star Baby.
Desde Gales los Bystanders, honrados trabajadores de la música de largo recorrido (ya estaban rondando desde los primeros sesenta), en su mejor momento, cuando descubrieron los kaftanes y la psicodelia, abandonando el simple beat que venían practicando. Habilidosos músicos que luego harían fortuna en la escena progresiva bajo el nombre de Man, recrean a la perfección I Am The Walrus y, como otras bandas británicas (pienso ahora en Tomorrow y en los Move) se fijan en el repertorio de los Byrds para apropiarse de su Renaissance Fair, además de su propia Royal Blue Summer Sunshine Day, bonita pieza de sunshine pop.
Para finalizar, The Gun (en la foto de arriba), una de las bandas pioneras del hard rock psicodélico en sus primeros momentos tras abandonar el nombre de The Knack y abrazar esta nueva encarnación y sonido que alcanzaría una enorme fama tras la publicación del single Race With The Devil. The Lights On The Wall (la segunda canción con un sonido inferior) es la primera canción que de ellos se nos ofrece, además de la versión de Simon & Garfunkel A Most Peculiar Man y, sobre todo, un fulminante ataque a otra de mis canciones de referencia, Hold On, la misma que habían llevado a la cumbre los Rupert's People y los Fleur de Lys con y sin Sharon Tandy.
Completado con un jugoso libreto de 24 páginas repleto de información de cada una de las bandas, simplemente un disco excelente, una compilación necesaria y totalmente recomendada! No para de sonar en la redacción de Making Time!
by David

martes, 11 de enero de 2011

THE ZAKARY THAKS

Una de las agradables sorpresas en forma de regalo de estas últimas fiestas ha sido esta estupenda recopilación, una muy necesaria puesta al día del repertorio de uno de los iconos de la escena del garage de Texas, los poderosos Zakary Thaks, a cargo de Cicadelic Records en 2010.
PASSAGE TO INDIA es el más completo, hasta la fecha, disco sobre la carrera de los Zakary Thaks, incluyendo por supuesto su icónico Bad Girl además de los otros singles de la banda, versiones inéditas y sus primeros pasos hacia la psicodelia, entre ellos la canción que le da título y una versión de I've Got Levitation de los 13th Floor Elevators. Supera, por supuesto, otros anticuados recopilatorios dedicados a la banda y a su libreto amplio e informativo expande las grabaciones conocidas de los tejanos hasta un número de 17.
Una compra recomendada, por ejemplo aquí, pero seguro que en tu tienda de discos habitual lo puedes encontrar mucho más barato (Jumping Man Música en La Laguna, Tenerife, es una buena opción). Necesario para archivar junto a tus copias del Nugget y para completar tan impresionante legado musical, posiblemente el estilo, las bandas más enérgicas jamás surgidas.
by David

lunes, 10 de enero de 2011

GERRY RAFFERTY

Hace unos años reseñamos en el blog un fantástico recopilatorio de la primera etapa como músico en solitario de Gerry Rafferty y como miembro de los Humblebums (junto al cómico Billy Connolly) para el sello Transatlantic, una serie de canciones de folk rock soberbia.
En este comienzo de año ha llegado la triste noticia del fallecimiento del protagonista de ese disco, Gerry Rafferty, a la edad de 63 años, y no podíamos dejar de recordarle y homenajearle desde aquí.
Una remarcable carrera discográfica la del escocés desde finales de los 60 y toda la década de los 70, un maestro de las melodías y con una gran habilidad para trasladar elementos del folk británico a la música pop, desde sus inicios con los mencionados Humblebums, su primer disco en solitario tras la disolución del dúo, su paso por los Stealers Wheel, grupo de turbulenta trayectoria en el que su presencia fue intermitente, y su cumbre comercial con el LP CITY TO CITY en 1978, un disco maduro, sobrio, abundante en melodías, a reivindicar algunos de sus mejores momentos como la canción que lo abre, The Ark.
Desde Making Time, nos quitamos el sombrero saludando al gran Gerry (Gerald) Rafferty.
by David