Ayer, 20 de mayo, cumplía años otra relevante figura cuya carrera se inició en esos años que tanto nos gustan. Joe Cocker, que vino a gritar a este mundo por primera vez en 1944, un cantante histriónico y espasmódico hasta el exceso que, sinceramente, nunca me ha llamado mucho la atención...Lo considero un tipo con gran voz pero sin mucha alma, no como otros shouters británicos de potente intensidad y emocionalidad, como Steve Marriott, Steve Winwood o Eric Burdon. Básicamente, un intérprete de versiones, alimentado siempre de canciones de otra gente pero eso sí, con la capacidad, al menos en sus primeros años, de rodearse de increibles músicos, como la arrolladora Grease Band o Leon Russell y compañía en el a veces divertido pero en gran parte tedioso Mad Dogs & Englishmen. Su éxito arrollador en Estados Unidos en el cambio de década y sus giras interminables a principios de los 70 le depararon el status de figura imprescindible de los años del hippismo, un reconocimiento que tal vez otros hubiesen merecido con más mérito. Ya en los 80 volvió para castigar al mundo con sus éxitos en diversas bandas sonoras. Como curiosidad, en el estupendo recopilatorio de Decca The Beat Scene encontramos un single de Cocker de sus inicios, bajo el pseudónimo Vance Arnold.
Joe Cocker, lo tuyo no es para tanto... pero eso sí, ¡¡¡¡felicidades!!!!
by David
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